La Biblia está llena de profecías, y no solamente en el Apocalipsis. De ellas, algunas están por cumplirse todavía, de modo que debemos estar atentos.

Y tenemos como más segura la palabra profética, a la cual hacéis bien es estar atentos. 2 Pedro 1:19

En el Nuevo Testamento, Apocalipsis está saturado de profecías para los últimos días. Y en el Antiguo Testamento, es el libro de Daniel el que está lleno de profecías que deben cumplirse en nuestros días.

Y tú, Daniel, guarda en secreto las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin.” Daniel 12:4.

Apocalipsis y Daniel, enfocan el mismo período de la historia de la tierra, por eso, hablan de los mismos eventos y se complementan. Cada uno esclarece los símbolos del otro, lo cuál nos ayuda mucho a comprender mejor lo que quieren decir.

EL FIN DEL MUNDO

Segunda Venida de Jesús

El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. Apocalipsis 11:15.

El mal que reina en el mundo no puede durar para siempre. Al final del tiempo estará a punto de destruir el mundo. Sin embargo, justo antes de que eso suceda, tendrá lugar la  Segunda Venida de Cristo. Jesús aparecerá en las nubes de los cielos para instaurar un reinado que no tendrá final, tal como nos dice Apocalipsis. Pero Daniel nos da mas detalles.

LA PROFECÍA DE DANIEL 2

Nabucodonosor tuvo un sueño, que no podía recordar y Daniel, orando a Dios, logró recordárselo:

En su visión, su Majestad vio frente a sí una enorme estatua resplandeciente de un hombre; daba terror verla. La cabeza de la estatua era de oro fino. El pecho y los brazos eran de plata, el vientre y los muslos de bronce, las piernas eran de hierro y los pies eran una mezcla de hierro y barro cocido. Mientras usted observaba, una roca de una montaña fue cortada, pero no por manos humanas. La roca golpeó los pies de hierro y barro, y los hizo pedazos. La estatua quedó reducida a pequeños trozos de hierro, barro, bronce, plata y oro. Luego el viento se los llevó sin dejar rastro alguno, como la paja cuando se trilla el grano. Sin embargo, la roca que derrumbó la estatua se convirtió en una gran montaña que cubrió toda la tierra.  Daniel 2:31-35

Y también, el Señor le dio la interpretación:

Éste es el sueño; también la interpretación de él diremos en presencia del rey. Tú, oh rey, eres rey de reyes; porque el Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y majestad. Y dondequiera que habitan hijos de hombres, bestias del campo y aves del cielo, él los ha entregado en tu mano, y te ha dado el dominio sobre todo; tú eres aquella cabeza de oro. Y después de ti se levantará otro reino inferior al tuyo; y luego un tercer reino de bronce, el cual dominará sobre toda la tierra. Y el cuarto reino será fuerte como hierro; y como el hierro desmenuza y rompe todas las cosas, desmenuzará y quebrantará todo. Y lo que viste de los pies y los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; mas habrá en él algo de la fuerza del hierro, así como viste hierro mezclado con barro cocido. Y por ser los dedos de los pies en parte de hierro y en parte de barro cocido, el reino será en parte fuerte, y en parte frágil. Así como viste el hierro mezclado con barro, se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro. Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre, de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación. Daniel 21:36-45

Un sueño en el que veía los diferentes reinos que dominarían el mundo y el reinado final de Cristo.

El cual hirió á la imagen en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó. Entonces fue también desmenuzado el hierro, el barro cocido, el metal, la plata y el oro, y se tornaron como tamo de las eras del verano, y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Mas la piedra que hirió á la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra.

Daniel 2:34,35

La destrucción de esta imagen con la piedra tiene un gran significado: pone punto final a este mundo, tal como afirma Apocalipsis.

Cada parte de esta gran imagen representaba un imperio que surgiría en la historia. Los Medos y los Persas conquistaron a los Babilónios y los Griegos a los Medos y los Persas. A Daniel no se le dijo el nombre de este cuarto reino que dominaría en el mundo, porque estaba en el futuro, muy lejos de sus días, pero la historia nos revela que fue Roma quien sucedió al reinado de los griegos y dominaron Europa y hasta los países del Medio Oriente.

No fue una coincidencia que cuando el Imperio Romano cayó no fue por la conquista de otro imperio. Sino al contrario, fue debilitado perdiendo su poder, y dividido en 10 reinos que componen la Europa moderna, con países tales como Francia, Alemania, Italia, Inglaterra, España, etc. También estudiaremos más tarde estos 10 reinos simbólicamente representados en la profecía de Apocalipsis, sólo que allí aparecen representados como 10 cuernos que suben de la cabeza de una bestia.

Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre, de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación. Daniel 2:44,45

Estamos viviendo ahora en “los días de estos reyes”. Cada parte de esta profecía ha tenido su fiel cumplimiento, excepto la última parte: la de la piedra que destruyó la imagen. Por eso no tenemos dudas de que la venida del Señor se acerca. Y mientras tanto, debemos tener paciencia y confiar en Dios y en sus promesas, tal como afirma Santiago 5:8.

Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca. Santiago 5:8.

La Palabra de Dios se cumple siempre, porque Él ve el final desde el principio.

No es que la historia esté escrita y deba ser así, sino que Dios ya sabe lo que va a pasar. Es distinto. No hay predestinación, sino conocimiento previo de los acontecimientos. Dios está por encima del tiempo y ve todo.

El Señor tiene un plan de salvación. Sin embargo, el ser humano, en su libertad, puede aceptarlo o rechazarlo. Y aunque los planes de Dios se cumplen siempre, de un modo u otro, los seres humanos podemos contribuir a ellos o todo lo contrario.

Es interesante, en este sentido, ver el papel que ha jugado Israel (los judíos) en la historia, y cómo lo que el Señor quería para ellos nunca se cumplió por su falta de fe y de confianza en Él.

LA PROFECÍA DE EZEQUIEL

Y tú, profano e impío príncipe de Israel, cuyo día ha llegado ya, el tiempo de la consumación de la maldad, así ha dicho Jehová el Señor: Depón la tiara, quita la corona; esto no será más así; sea exaltado lo bajo, y humillado lo alto. Ezequiel 21:25,26

Dios tenía un propósito especial para Israel (los judíos). Ellos debían ser un ejemplo para todos los demás pueblos. Debían ser los instrumentos que Dios había escogido con la misión de salvar a los que no Le conocían. Sin embargo no fue así, por su excesivo orgullo y su continua falta de fe no fueron precisamente un ejemplo, y como consecuencia de alejarse de Dios tuvieron serios problemas.

Por lo tanto, así ha dicho Dios el Señor:«Ustedes han hecho que se recuerde la maldad que han cometido. Sus traiciones y pecados han quedado al descubierto. Por eso, por haber traído esto a la memoria, caerán en las manos del rey. Ezequiel 21:24

Pero no solamente ocurrió con el pueblo de Israel. La conducta rebelde de cada nación tuvo como consecuencia su destrucción.  El mal no puede generar bien, ni orden ni amor. Genera sufrimiento, desorden, muerte y destrucción. Cuando una nación estaba en la cima de su poder, y de su maldad, otra nación la conquistaba, tal como recoge Daniel 2. Podemos verlo en la historia:

1. Babilonia fue destruida por los medos y los persas.
2. Medo Persia, fue destruida por los griegos.
3. Grecia, fue destruida por los romanos.
4. El Imperio Romano, fue destruido a través de su división.
5. Una amalgama de reinos que no se ponen de acuerdo, unos mas fuertes y otros mas débiles, definen muy bien a Europa.
6. Jesús viene e instaura Su reinado eterno.Ya no hay mas reinos. Ese es el último y definitivo. Cristo acabará con el mal y tomará la corona que por derecho le pertenece desde siempre.

Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina! Apocalipsis 19:6